Harry Potter y las Reliquias de la Muerte

El pasado 14 de julio pude ver el desenlace final en la gran pantalla de la famosa novela escrita por J. K. Rowling: "Harry Potter y las Reliquias de la Muerte".

Durante cinco horas permanecí sentado en una butaca del cine, ya que elegí para la ocasión una sesión en la que se iban a poder ver las dos partes en que se dividía esta película, pudiéndose ver la segunda parte en 3D para apreciar aún mejor los efectos especiales que se incluyeron en ella.

Desde el inicio de la saga a través de los libros, me convertí en un gran fan, puesto que fueron los primeros libros que devoré con ansia por saber qué pasaba con la historia y con su protagonista. Una vez que me enteré de que los libros estaban teniendo tanto éxito que comenzaron a rodar la primera película basada en el primer libro, esperé con impaciencia a que la estrenaran, y una vez que se hizo fui directo al cine para verla.

Lo que me llamó la atención del primer libro que me leí, que fue por causas ajenas a mí, "Harry Potter y la Cámara Secreta", me llamó mucho la atención el mundo que creó la autora y cómo la magia se daba cabida como si fuera real en la vida de unos personajes.

Como muchas películas basadas en libros, es imposible que se puedan mostrar todos los acontecimientos narrados, ya que sino el presupuesto sería mayor y las películas tendrían una duración bastante considerable, haciendo que el público terminase cansado de estar sentado en una butaca.

Siempre he sido partidario de los libros en lugar de las películas, porque considero que es mucho más interesante un libro que una película. Sin embargo, quise comprobar de primera mano si la adaptación en la gran pantalla casaba con la interpretación del mundo de Harry Potter que había creado en mi mente. El resultado fue bastante similar, y comencé a ver las películas a medida que las estrenaban, saliendo del cine satisfecho con el trabajo realizado en cada una de ellas.

Mucha gente opinará que la última y definitiva película de Harry Potter tiene fallos, se salta cosas o incluso sugiere cosas que en realidad no suceden en el libro. No obstante, mi opinión de esta última película es que consigue su objetivo: mantener al público en tensión y ofrecer un buen espectáculo de magia, acción y humor en determinados momentos de la película.

En conclusión, recomiendo a todos los seguidores de Harry Potter que vean esta película porque merece la pena y se ha conseguido dar un buen punto final a la saga.

Un saludo y hasta la próxima entrada ;)